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La lírica renacentista española

La lírica renacentista española. Corrientes poéticas. Garcilaso de la Vega (1499-1536 ). El poeta italiano Andrea Navaggiero animará a Boscán y a Garcilaso a intentar en castellano las formas y metros italianos, en especial el endecasílabo y el heptasílabo.

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La lírica renacentista española

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Presentation Transcript


  1. La lírica renacentista española

  2. Corrientes poéticas

  3. Garcilaso de la Vega (1499-1536)

  4. El poeta italiano Andrea Navaggiero animará a Boscán y a Garcilaso a intentar en castellano las formas y metros italianos, en especial el endecasílabo y el heptasílabo

  5. En ese año de 1526, con motivo de las bodas de Carlos I con Isabel de Portugal, acompaña a la Corte en un viaje por varias ciudades españolas y se enamora platónicamente de una dama portuguesa de la reina, Isabel Freyre, que canta bajo el anagrama de Elisa en sus versos

  6. Esta Elisa habría podido ser en realidad la segunda mujer de su hermano Pedro Laso, la hermosísima Beatriz de Sá

  7. Se instala en Nápoles, en cuya vida intelectual, que entonces giraba en torno a la Academia Pontaniana, se integró rápidamente,, y trabó amistad con poetas como Bernardo Tasso o Luigi Tansillo, así como con teóricos de la literatura como Antonio Sebastiani Minturno y, en especial, Mario Galeota.

  8. La poesía de Garcilaso está dividida por su estancia en Nápoles (primero en 1522–1523 y luego en 1533). Antes de ir a Nápoles su poesía no está marcada por rasgos petrarquistas.

  9. Después de su estancia abundará en rasgos de la lírica italiana, influido tanto por autores anteriores como Francesco Petrarca, como por autores contemporáneos como Jacopo Sannazaro, autor de La Arcadia (1504), cuyo mundo, en el que sonidos, colores... invitan a la reflexión acompañando a los sentimientos, hará suyo. También influye a Garcilaso Ludovico Ariosto, de quien toma el tema de la locura de amor.

  10. Es en Italia donde Garcilaso fortalece su clasicismo, ya aprendido con los humanistas castellanos en la Corte, y redescubre a Virgilio y sus Bucólicas, a Ovidio y sus Metamorfosis y a Horacio y sus Odas, sin olvidar otros autores griegos que también estudia.

  11. La obra poética de Garcilaso de la Vega está compuesta por cuarenta sonetos, cinco canciones, una oda en liras, dos elegías, una epístola, tres églogas y siete coplas castellanas y tres odas latinas,

  12. Desde la aparición de sus obras no se ha podido ignorar la revolución métrica y estética operada por él en la lírica española al introducir una serie de estrofas (terceto, soneto, lira, octava real, endecasílabos sueltos, canción en estancias), el verso endecasílabo y su ritmo tritónico, mucho más flexible que el rígido y monótono del dodecasílabo, y el repertorio de temas, estructuras y recursos estilísticos del petrarquismo.

  13. Juan Boscán i Almogàver y Diego Hurtado de Mendoza y Pacheco, introductores junto a Garcilaso de la lírica italianizante

  14. Prefiere las palabras usuales y castizas a los cultismos extraños a la lengua, busca el equilibrio clásico, la estilización del nobilitare renacentista de una lengua vulgar y la precisión ante todo. Como afirma en su Égloga tercera, Más a las veces son mejor oídos el puro ingenio y lengua casi muda, testigos limpios de ánimo inocente, que la curiosidad del elocuente.

  15. El objetivo de la poesía es ser oída, es la comunicación de los sentimientos, no el cortesano despertar de admiración. Garcilaso, pues, prefiere el tono íntimo, personal y confidencial en la poesía a la retórica. ¡Cuán bienaventuradoaquél puede llamarseque con la dulce soledad s’abraza,y vive descuidadoy lejos d’empacharseen lo que al alma impide y embaraza!

  16. Garcilaso cuida especialmente la musicalidad del verso mediante el uso de la aliteración y un ritmo en torno a los tres ejes principales del endecasílabo. El dulce lamentar de dos pastores ¡Oh dulces prendas, por mí mal halladas Tanto pudiese el son, que en un momento

  17. Utiliza asiduamente el epíteto con la intención de crear un mundo idealizado donde los objetos resultan arquetípicos y estilizados al modo del platonismo.: Corrientes aguas puras, cristalinas Corrientes aguas puras, cristalinas

  18. Por otra parte, es muy hábil en la descripción de lo fugitivo y huidizo; su poesía produce una vívida sensación de tiempo y se impregna de melancolía por el transcurso de la vida, lo que él llamó su «dolorido sentir». ¡Oh más dura que mármol a mis quejas, y al encendido fuego en que me quemo más helada que nieve, Galatea!, estoy muriendo, y aún la vida temo; 60 témola con razón, pues tú me dejas, que no hay, sin ti, el vivir para qué sea.

  19. El paisaje resulta arcádico. Aparecen los temas mitológicos como alternativa a los temas religiosos: Sus temas preferidos son los sentimientos de ausencia, el conflicto entre razón y pasión, el paso del tiempo y el canto de una naturaleza idílica que sirve de contraste a los doloridos sentimientos del poeta. Cree en un trasmundo que no es el religioso cristiano, sino el pagano.

  20. Locus amoenus Tópicos garcilasianos

  21. La obra de Garcilaso no es muy extensa. En los sonetos y canciones, Garcilaso combina el estilo petrarquista con la retórica amorosa y los tópicos de la lírica cancioneril.

  22. Las églogas son las obras más importantes de Garcilaso: La Égloga I es la creación más significativa porque combina perfectamente la pasión amorosa y la perfección formal. La Égloga II es la más extensa y consta de dos partes: en la primera se relatan los amores entre la pastora Camila y Albanio; la segunda parte, es una apología alegórica de la casa de Alba. La Égloga III es un poema escrito en octavas reales.

  23. La lírica en el segundo Renacimiento

  24. En esta época se produce un importante cultivo de la poesía religiosa, con autores de la talla de Santa Teresa de Jesús, fray Luis de León, y sobre todo san Juan de la Cruz, quizás uno de los tres mejores poetas de todos los tiempos en cualquier lengua.

  25. En marzo de 1572 fue detenido por la Inquisición y encarcelado en Valladolid tenía. Los cargos que había contra él tenían que ver con su predilección por la Biblia hebraica en lugar de la Vulgata y la traducción al castellano que había realizado del libro del Cantar de los Cantares

  26. Durante cinco años fray Luis permanece aislado en una celda de la Inquisición sin saber quién le acusa y, durante algún tiempo, de qué se le acusa. Al salir dejó escrita esta décima: Aquí la envidia y la mentira me tuvieron encerrado. Dichoso el humilde estado del sabio que se retira de aqueste mundo malvado, y con pobre mesa y casa en el campo deleitoso con sólo Dios se compasa, y a solas su vida pasa, ni envidiado ni envidioso.

  27. La labor de traducción bíblica de fray Luis se centra en el Cantar de los Cantares, pero también en el Libro de Job y en algunos Salmos.

  28. El propio fray Luis dejó escrito su concepto de la poesía, "una comunicación del aliento celestial y divino", en su De los nombres de Cristo, libro I,

  29. Sus temas preferidos, si dejamos a un lado los morales y patrióticos son, el deseo de la soledad y del retiro en la naturaleza (tópico del Beatus Ille) y la búsqueda de paz espiritual y de conocimiento (lo que él llamó la verdad pura sin velo).

  30. Como poeta desarrolló la lira como estrofa, pero prefería el endecasílabo para las traducciones de poetas latinos y griegos, que por lo general realizaba en tercetos encadenados o en octava real.

  31. Escribir, piensa Fray Luis, es actividad difícil ("negocio de particular juicio"). Se usarán palabras comunes, pero selectas, ya que el buen escritor, entre Las que todos hablan, elige las que convienen y mira el sonido de ellas y aun cuenta a veces las letras y las pesa y las mide y las compone para que no solamente digan con claridad lo que pretenden decir, sino también con armonía y dulzura.

  32. La armonía era para él el equilibrio de la frase, que logra mediante una perfecta correspondencia entre fondo y forma aprendida en los clásicos latinos, a los que estudió no sólo para imitarlos, sino para reproducir sus cualidades en castellano. Su lengua, pues, es la de Juan de Valdés: natural, selecta y sin afectación.

  33. La crítica actual ha hecho notar que su lenguaje y técnica traslucen el carácter vehemente y apasionado del autor. Así que su estilo sólo es sencillo y austero en cuanto a las imágenes, el vocabulario y los adornos.

  34. El aire se serena y viste de hermosura y luz no usada, Salinas, cuando suena la música extremada por vuestra sabia mano gobernada. A cuyo son divino mi alma, que en olvido está sumida, torna a cobrar el tino y memoria perdida de su origen primero esclarecida. Pero la sintaxis, que dice más sobre la esencia verdadera del autor, se ve constreñida por la exigente forma de la lira y recurre con frecuencia desusada al encabalgamiento abrupto, expresando con ello un carácter atormentado, y desborda con frecuencia el cauce del verso y aun de la estrofa.

  35. Por otra parte, su vehemencia se refleja a través de las numerosas expresiones admirativas e interjecciones que pespuntean sus versos. ¡Oh ya seguro puerto de mi tan luengo error! ¡oh deseado para reparo cierto del grave mal pasado! reposo dulce, alegre, reposado!;

  36. Y tanto en su prosa como en su verso recurre habitualmente a las parejas de palabras unidas por un nexo o una coma, dobletes de palabras con significado complementario, o a las geminaciones, dobletes de sinónimos, que reposan con su equilibrio esa pasión que se esfuerza en contener tanto en su verso como en su prosa.

  37. Su afán comunicativo se expresa en una particular preferencia por la segunda persona, cuya consecuencia es que sus textos suelen tener un carácter discursivo, de comentario moral que exhorta de alguna manera al receptor. En ti, casi desnudo deste corporal velo, y de la asida costumbre roto el ñudo, traspasaré la vida en gozo, en paz, en luz no corrompida; de ti, en el mar sujeto con lástima los ojos inclinando, contemplaré el aprieto del miserable bando, que las saladas ondas va cortando:

  38. Este tono discursivo, oratorio, da pie a frecuentes enumeraciones, exclamaciones e interrogaciones retóricas, y abundan también los pasajes descriptivos con el que el autor hace vivir al interlocutor en tiempo presente lo que evoca

  39. Las odas son cortas: solamente dos pasan de los cien versos, la XX y la XXI.

  40. Son frecuentes como manifestación de la tensión entre su vehemencia y su deseo de refrenarla los encabalgamientos, numerosísimos y a veces violentamente abruptos, por lo que caracteriza al estilo de fray Luis una tensión particular.

  41. Componentes de la lírica de fray Luis de León

  42. Empezó a escribir en 1572 De los nombres de Cristo, obra en tres libros que no terminaría hasta 1585. En ella muestra la elaboración última y definitiva de los temas e ideas que esbozó en sus poesías en forma de diálogo ciceroniano donde se comentan las diversas interpretaciones de los nombres que se dan a Cristo en la Biblia

  43. También se deben a fray Luis algunas otras obras morales en castellano sobre educación, como La perfecta casada,, donde describe lo que para él es una esposa ejemplar. Es una obra que hay que poner en correlato con otras del mismo género escritas por Luis Vives (De Insitutiones Feminae Christianae, traducida al castellano en Valencia en 1528) y otros humanistas europeos del Renacimiento.

  44. Como traductor vertió del hebreo en verso el último capítulo del Libro de los proverbios y el Libro de Job, que además comentó.

  45. Vertió también el Cantar de los cantares en octavas.

  46. Del latín las Bucólicas y los dos primeros libros de las Geórgicas de Virgilio, así como 23 versiones seguras de las Odas de Horacio y 7 atribuidas por el padre Merino; también la versión del Rura tenent de Albio Tibulo y algunos fragmentos de poetas griegos. De los italianos hay poemas de Pietro Bembo y también de Petrarca.

  47. Y a estudiar

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