1 / 10

“Faroles de caza y pesca”

Miguel-A. “Faroles de caza y pesca”. “Una tarde parda y fría, de invierno, los colegiales estudian monotonía de lluvia tras los cristales. En la clase, en un cartel se representa a Caín fugitivo, y muerto Abel, junto a una mancha carmín. Con timbre sonoro y hueco,

liv
Download Presentation

“Faroles de caza y pesca”

An Image/Link below is provided (as is) to download presentation Download Policy: Content on the Website is provided to you AS IS for your information and personal use and may not be sold / licensed / shared on other websites without getting consent from its author. Content is provided to you AS IS for your information and personal use only. Download presentation by click this link. While downloading, if for some reason you are not able to download a presentation, the publisher may have deleted the file from their server. During download, if you can't get a presentation, the file might be deleted by the publisher.

E N D

Presentation Transcript


  1. Miguel-A. “Faroles de caza y pesca”

  2. “Una tarde parda y fría, de invierno, los colegiales estudian monotonía de lluvia tras los cristales. En la clase, en un cartel se representa a Caín fugitivo, y muerto Abel, junto a una mancha carmín. Con timbre sonoro y hueco, truena el maestro, un anciano mal vestido, enjuto y seco, que lleva un libro en la mano. Y todo un coro infantil va cantando la lección: "mil veces ciento, cien mil; mil veces mil, un millón". Una tarde parda y fría, de invierno, los colegiales estudian monotonía de lluvia tras los cristales.” (Antonio Machado).

  3. Hacia 1959-60 comencé mi etapa escolar. Fue en una escuela rural. Tras un primer periodo de aprendizaje de lectura y escritura, el único libro de texto usado, que englobaba todas las asignaturas, era la enciclopedia Álvarez. Por supuesto, el método de estudio respondía fielmente a la descripción de Antonio Machado: “Y todo un coro infantil / va cantando la lección: / "mil veces ciento, cien mil; / mil veces mil, un millón“”. Recuerdo que la primera lección de historia sonaba asÍ: “Los hombres primi-i-tivos vivían en cave-e-rnas... Se dedi-i-caban a la caza y a la pe-e-sca”. Pues bien, hoy la caza y la pesca son “deportes” (entrecomillas) con faroleo habitual.

  4. Dos amigos, tras el fin de semana, vuelven al trabajo el lunes. - ¡Hombre, Manuel! ¿Qué tal el fin de semana? ¿Habías ido de pesca, no?. - Pues sí, Julián. Fui a la playa con mi mujer y los niños. ¡Y no vas a creer lo que me pasó! Pues resulta que fui a dar un paseo por la ría, donde se ponen los pescadores. Iba yo comiéndome un bocadillo de chorizo, y observé que los peces se tiraban a las migas que caían al agua. Pues nada, que, ni corto ni perezoso, metí el chorizo en el agua... y viene un besugo, que no sé qué hacía allí, le pega un mordisco al chorizo, tiré de él, y lo saqué del agua. Macho, ¡si hubieras visto que pez! ¡Pesaba unos 40 kilos!.

  5. - ¡Coño! ¿Qué animalote, no?. - Pues, como lo oyes. ¿Y tú qué tal durante el fin de semana?. - ¡Calla, no me hables, que estoy metido en un lió tremendo!. - ¡Coño! ¿Qué te ha pasado?. - Pues que me fui a cazar, y estuve todo el día por el monte, y nada, ¡ni una pieza!. - ¡Qué mala suerte!.

  6. - Total, que cuando estaba de vuelta al Land-Rover, veo que cerca de la carretera aparece un ciervo. Casi sin pensarlo, le apunto, y lo dejo seco. - ¡Anda, qué suerte! ¡Eso está mejor! ¿Oye, pero no estamos en veda de ciervos?. - ¡Coño, claro que estamos en veda de ciervos!. Ahí empezó todo el lío. Lo malo es que cuando me acerqué, resulta que era una cierva, y estaba preñada. 44 segundos.

  7. - ¿Y qué hiciste?. - ¡Pues qué voy a hacer! Cogí una pala del coche, y me puse a cavar un hoyo para enterrar a la cierva. - ¡Qué buena idea!. - ¡Calla, calla... que cuando ya estaba acabando de hacer el hoyo, resulta que aparece el guarda!. - ¡Ay, diablos! ¡Qué multa, macho!. - ¡Qué multa, ni qué carajo! Cabreado, como estaba, no se me ocurrió otra cosa que coger la escopeta, y pegar dos tiros al guarda. - ¡¡AY, A LA CÁRCEL, JULIÁN!!. - ¡Sssshhhhhhh! ¡¡Quieres, hablar mas bajo, coño!!.

  8. - ¡A la cárcel, Julián! ¡A la puta cárcel, por burro!. - ¡Que no, hombre! ¿No ves que tenía hecho un hoyo? Pues nada, con enterrar al guarda con el ciervo, se acabó el problema. - ¡NO ME JODAS!. - ¡Ssshhhhh! Habla más bajo. Lo malo fue que cuando estaba metiendo al guarda en el hoyo, apareció una pareja de novios, que pasaba por allí. - ¿Y qué hiciste?. - ¡Coño, qué voy a hacer! ¿Qué quieres, que me metan en la cárcel? ¡Les pegué cuatro tiros a los dos! Total, era hacer un poco más grande el hoyo.

  9. - ¡¡AAAAYYY, JULIÁN!! ¡¡A LA CÁRCEL PARA TODA TU PUTA VIDA!!. - ¡SHSSSHHHHHHH! ¡Quieres hablar más bajo! Lo peor es que, cuando estaba agrandando el hoyo, llegó un autobús lleno de turistas ingleses. - ¡¡¡ AAAAAYYYYY, NO JODAS, JULIÁN!!! ¡NO JODAS! ¿¿¡¡QUÉ LES HICISTE A LOS TURISTAS!!??. ¡NO JODAS! ¿¿¡¡QUÉ LES HICISTE!!??.

  10. - ¡¡¡¿¿¿O le vas quitando kilos a tu besugo, o mato a tiros a todos los turistas ingleses ahora mismo???!!!.

More Related